Instancias.

Las instancias que se nos presentan son diarias, desde la instancia de definir la nota de una prueba a definir nuestro futuro. Porque decidir el futuro no se basa solamente en decir que carrera uno quiere seguir cuando termine el secundario, sino se trata de las acciones que gravamos en el presente. Hay una frase que dice "si queres mirar las causas del presente debes mirar las causas del pasado y si queres mirar las causas del futuro debes mirar las acciones del presente". Las acciones que agravamos en el hoy, son las que se presentarán en el futuro ya sean buenas o no tan buenas, considero que lo que uno hace es lo que lo define y lo que siente lo que es. Otra de las cosas que considero es que las instancias a veces son finales, que no hay vuelta atrás, que cuando uno toma una decisión directamente grava su futuro, su destino. 
Todos y me incluyo dejamos las cosas en manos de algo que llamamos "vida" o "destino", está bien las cosas que tienen que pasar van a pasar, es la ley del universo. Pero a la misma vez uno grava su destino, uno hace su historia. Yo creo que la historia de cada uno comienza desde hace mucho tiempo y es eterna. La historia que uno grava en esta vida se compone de diferentes factores, primero y principal del karma (acciones gravadas manifestadas), la esencia de cada uno (como es y lo que trae), la forma en el cual lo crían y lo que ve desde chico y por último las experiencias. Yo creo que a medida que pasan los años a raíz de esto es como accionamos y de lo que nos vamos formando, vamos formando nuestra historia de vida.
Por eso mismo la vida es una instancia, principal siempre. Uno está en instancias decisivas en su vida desde el momento en que nace hasta que abandona esta existencia. Por eso quizás no logro siempre comprender el miedo a la muerte de las personas, creo que es de iluso pensar que no hay vida y que todo se termina acá, no se quizás tengo otra filosofía de vida que me hace creer en esto. La vida se extiende mucho más, el karma busca la mejor forma de manifestarse para que se logre aprender de cada cosa.
Por eso es que muchas veces cuando recuerdo la gente que estuvo y que está, gente que se fue aún cuando uno creía que iba a permanecer siempre. Cada uno fue parte de la historia del otro, aunque sea mínima y quizás en la vida del otro fue mucho más que una mínima parte, mucho más. No se lamenten porque las cosas terminaron, sonrían porque sucedieron. No se lamenten porque las relaciones no funcionaron, porque no todo funciona, pero piensen que formaron parte del aprendizaje y la experiencia del otro, lo ayudaron a ser mejor. Y nada más lindo que ayudar al otro a ser mejor persona, a impulsarlo a buscar la felicidad.
Al igual que las amistades y las parejas, te tienen que impulsar y vos impulsarles en cada instancia las ganas de vivir, de progresar, de cumplir sueños y de amar. Ganas de amarte, de disfrutar y de reír. No sirven las relaciones entre personas que no se apoyan en sus decisiones y viven juzgando al otro, no sirve encerrarte en una persona o en algo que no va. No te encierres en una persona por nada del mundo, todo lo contrario tomate tu tiempo y el tiempo necesario para tus amistades al igual que para tu familia.
Busca tu lugar, busca tu voz y hacete escuchar. Busca tu tiempo, tu instancia y tu mundo. 
Busca en lo más profundo de vos que ahí es donde de está el amor más profundo 
y sincero, en vos.